Hay muchas cosas que me gustan de la virtualidad, pero dentro mi top 3 están los eventos en vivo. Generar contenido en vivo me parece algo fascinante, sobre todo porque pone a prueba la calidad del contenido que se quiere compartir, la versatilidad de la tecnología, el control y administración del tiempo, la reacción ante los inconvenientes y la improvisación como un acto "normal" de algo que ocurre de manera síncrona. Parece que este tipo de contenido (que no es nada nuevo) se ha masificado en cuanto a su uso para el mundo de hoy marcado por el COVID-19.
Mi primera sesión en vivo la organicé en el año 2008 para mis alumnos de Prácticas Profesionales IV de la mención de Diseño y Gestión de Proyectos Educativos de la Licenciatura en Educación de la Universidad Central de Venezuela. Recuerdo que contactamos con la participación de la Dra. Mariana Angelita Buele Maldonado, especialista en educación de la Universidad Técnica Particular de Loja (UTPL) ubicada en la República del Ecuador. Fue una experiencia muy enriquecedora para todos, aprendimos mucho, sobre todo a saber que si era posible este tipo de actividades. Aquí les dejo una foto de ese día:
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31 de mayo de 2008. Sala C. Universidad Central de Venezuela |
Estas conexiones se hacían por direcciones IP (número que identifica de forma única a una interfaz en red de cualquier dispositivo conectado a ella que utilice el protocolo IP (Internet Protocol), que corresponde al nivel de red del modelo TCP/IP), donde prácticamente cada máquina involucrada se conectaba entre si. De hecho, en el año 2008, estas conexiones eran bastante sofisticadas y requerían de un personal exclusivo para su administración. Es por ello que recurrimos a mi equipo del Sistema de Educación a Distancia (SEDUCV) desde donde pudimos llevar a cabo el evento.
Felizmente todo evoluciona. En el año 2009, la universidad adquirió una licencia de Elluminate Live, plataforma de videoconferencia muy de moda en la época. Fue toda un reto integrarla al Campus Virtual de la Universidad Central de Venezuela desarrollada sobre Moodle, pero el equipo técnico encabezado por Pedro Contreras lo logró y pudimos utilizar Elluminate Live como una actividad dentro de la plataforma LMS, algo que sin duda marcó un antes y un después en la forma de hacer educación a distancia. De hecho, al ser una actividad podía ser calificable, algo que sin duda era importante para la fecha.
Recuerdo que, en plena instalación de este servicio, la empresa Blackboard (Blackboard Inc. es una compañía estadounidense de tecnología educativa con sede en Washington D. C.) compró Elluminate Live y fuimos el primer caso de éxito mundial en usar la nueva Blackboard Collaborate, una plataforma increíble, muy estable y habilitada para nuestros 5000 docentes, 80000 alumnos y un número aproximado de 2000 aulas virtuales. Esto permitió que nos conectáramos de manera ágil (sin conexiones IP) utilizando solo Internet y con un par de clics ya teníamos sesiones creadas. Era una maravilla en realidad.
Blackboard Collaborate nos permitió llevar la educación de la Universidad Central de Venezuela a los hogares de nuestros alumnos y profesores, con el eslogan "La UCV contigo donde quieras" como estandarte, el SEDUCV comenzó al fabuloso camino de la virtualidad. Así mismo, las experiencias con el Programa Samuel Robinson (del 2008 al 2014), un referente en cuanto a sistema de ingreso universitario se refiere, nos enseño una nueva forma de hacer educación en vivo, llevando nuestras clases del Módulo de Gestión de la Información a modelos cada vez más virtuales.
Realizamos varios eventos de alto impacto conocidos como Moodle Moot (nombre oficial de los Encuentros Moodle) utilizando Blackboard Collaborate para las sesiones en vivo, organizados desde la Asociación Venezolana de Educación a Distancia (AVED) y Virtual Educa Venezuela.
Paralelo a toda la experiencia con Blackboard Collaborate puedo señalar otras plataformas que han sido referentes en cuanto a la generación de contenido en vivo. Skype (antes de ser comprado por Microsoft en 2011), sin duda alguna, tiene un espacio en todas las historias de tienen que ver con comunicación. La versión gratuita de Skype hizo posible los "primeros pasos", de muchos de nosotros, por el camino de la virtualidad. Prácticamente no he conocido a una persona mayor de 30 años que no haya utilizado Skype al menos una vez en su vida. Lo mismo podemos decir de WizIQ y otras plataformas.
El año 2011 fue un año increíble para las sesiones en vivo. Google a través de su servicio ampliamente conocido como HangOuts ofrecía la posibilidad de transmitir en vivo. Esta vez, una llamada entre 2 y hasta 20 personas, era posible que apareciera en YouTube, permitiendo que una simple comunicación pudiese ser vista de forma ilimitada, además de otras opciones como "compartir pantalla" y "comunicación por chat". Con este servicio logré generar mucho contenido en vivo, aprendí sobre las diferentes formas de moderar eventos y controlar las conversaciones/comentarios que permitía YouTube.
Como lo dije anteriormente, todo evoluciona. En el año 2015 comencé mi carrera como docente de la Maestría en Educación mención eLearning en la Universidad de San Martín de Porres de la República de Perú, completamente online. Dentro de la metodología de trabajo didáctico, se tenían que organizar encuentros síncronos con alumnos, como una especie de tele clases. Esta experiencia fue muy enriquecedora porque utilizamos muchas plataformas tecnológicas como BigBlueButton, Zoom y Blackboard Ultra (la última versión). Esta vez integrada con plataformas como Canvas y Moodle.
Para mi, este servicio (HangOuts + Youtube), que luego se llamo YouTuve Live era realmente fantástico y me regaló grandes aprendizajes, como los vividos con la Universidad Yacambú de Venezuela, donde realicé más de 20 Webinars (Web Seminars = Seminarios Web) durante lo años 2016, 2017 y 2018. Todos los vídeos están disponibles en https://www.youtube.com/unyinternacional como resguardo de las grabaciones realizadas. En cada uno de estos eventos invité speakers de 15 países diferentes y la periodicidad de las actividades era una vez por mes. La convocatoria era orgánica y la respuesta masiva.
Luego, las redes sociales como Facebook e Instagram (y muchas otras) permiten la creación de contenido en vivo, que integrado con otras plataformas como OBS (https://obsproject.com/es) es posible la creación de sesiones altamente profesionales. Ya para finales de 2019 y principios de 2020 (a raíz del COVID-19) toda esta tendencia, se convirtió primero en una moda, pasando por una necesidad y ahora es una obligación. Lo cierto es que este tipo de contenido, que conecta con rapidez a las personas es parte de lo que estamos viviendo (y necesitando) hoy.
Aprender a generar contenido en vivo (para los que recién lo hacen) o mejorarlo (para quienes ya tenemos tiempo haciéndolo) ya no es cuestión de debate sino de acción. Avancemos, el tiempo de repensar sobre el uso de lo correcto es parte del pasado. Testear en vez de condenar es la consigna.